Nuestra simple condición de pertenecer a la raza humana, nos brinda una serie de derechos a los cuales podemos acceder gracias a que pertenecemos a un Estado Social de Derecho y nuestra Constitución Política nos brinda la garantía del cumplimiento de los mismos. Sin embargo, en muchas ocasiones la corrupción presente en algunos entes de control y de los encargados de administrar justicia parece de alguna manera favorecer los intereses de aquellos que día a día violan esos derechos fundamentales establecidos y generan en uno desazón e incertidumbre.
Para finalizar quiero expresarle al amigo lector que resulta de suma importancia que todos tengamos conocimiento sobre nuestros deberes y derechos sociales y políticos, establecidos dentro de nuestra Constitución. Hacer uso de las herramientas que nos da el Estado para hacer valer nuestros derechos es algo que debe hacer parte de nuestra identidad como ciudadanos, pero sobre todo genera un compromiso mayor con nuestro deseo de tener un país más inclusivo y menos discriminador. La corrupción que hoy nos agobia en algún momento dará paso a la equidad con una acción más decidida de nuestra parte.

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